La mujer, al tener matriz, posee una “ventaja”, ya que puede transferir conscientemente la función de interpretación del punto de encaje a este poderoso y competente órgano. A través de su abertura energética se le facilita el ingreso al ámbito de la percepción pura. (Carlos Castaneda).
En la mujer el útero se lo relaciona con el Dan Tien inferior. Dan Tien es una palabra china que significa cinabrio , que es el lugar, el hueco donde la piedra preciosa se gestó por fricción durante miles de años, este espacio es muy importante. Los alquimistas Chinos buscaban esos huecos o piedras talladas y los usaban como tubos de ensayo, como elementos de conversión o transformación de sustancias. El útero que también es hueco se lo relaciona con el concepto de cinabrio. El Útero es considerado por la medicina tradicional china un órgano maravilloso y tiene un meridiano propio, el meridiano del útero. Es un elemento muy Yin, atesora mucha sangre y nutre el feto, pero cumple funciones Yang, como la descarga menstrual y en el parto la descarga del feto. Por eso los chinos decían que el útero es un órgano maravilloso, que es eminentemente Yin pero que desde su funcionalidad tiene un aspecto Yang.
Hay una similitud entre el útero y el corazón, ambos órganos están formados por tejido muscular y ambos laten; uno continuamente, el otro, solo en momentos particulares; ambos tienen un ritmo, un pulso. Dese la fisiologia energética de la medicina tradicional china ambos Corazon y Utero están conectado por un vaso el Bao Mai Las mujeres han odiado muchas veces su sangre menstrual en lugar de comprender que ella es la fuente de su poder. Cuando las mujeres recuperan la conciencia y la sensibilidad del útero, pueden percibir y sentir su latido. Con cada latido el útero se extiende y desciende, como un movimiento ameboide, hasta hacerse incluso visible desde el exterior cuando se encuentra en estado de excitación fuerte. El útero guarda una memoria personal y ancestral. Por ello es importante que la mujer se vuelva hacia esta energía y para lograrlo tiene que caminar hacia sí misma, tiene que cavar hacia adentro y encontrar las respuestas que necesita para completarse. Tiene que aprender a descender a su mundo interno: solamente cuando descubra su verdadera esencia podrá usar toda su energía interior. El útero es un campo vibratorio sagrado dentro de la mujer, es el lugar donde todas las cosas nacen. Lo que las mujeres completas han hecho por siglos es tomar ese campo vibratorio sagrado y moverlo fuera. Al espacio ceremonial para crear la matriz en el exterior, y que algo nuevo pueda nacer en este mundo. Esa energía eminentemente amorosa y creativa.
Si las mujeres no hacen esto, los seres humanos como especie estamos perdidos.
Un hombre cercano a una mujer completa, se diviniza!. Para descubrir los misterios de la divinidad el hombre debe penetrar en el corazón de la mujer porque la Pachamama quiere sólo aquello que la mujer desea.
Si la Pachamama es amor, también la mujer lo es. El hombre debe considerar a la mujer como la versión de la naturaleza creadora cuya moral se basa en el respeto por la vida.
A través de la mujer el hombre puede alcanzar lo Absoluto, por eso es tan importante para ella direccionar su propia energía. Si logra tender ese puente de energía, el hombre que lo recorrerá sabrá que ella es el camino capaz de conducirlo a la divinidad.